A seis días de cumplir 32 años, Pablo Matera escribió una página dorada en la historia del rugby argentino. Con el partido disputado ante Inglaterra en el estadio Bicentenario de San Juan, el tercera línea alcanzó las 111 presencias con la camiseta de Los Pumas, superando a Agustín Creevy (110) y convirtiéndose en el jugador con más partidos en el seleccionado nacional.

El homenaje fue tan emotivo como merecido. Primero en salir al campo, Matera se detuvo, miró al cielo y a los cuatro puntos cardinales del estadio. En la pantalla principal, un video repasó su carrera desde el debut ante Chile en 2013 hasta sus 13 tries con la albiceleste. Las imágenes lo mostraron en acción, pero también en su intimidad: con su hijo D’Artagnan, su familia, sus clubes, sus pasos por Leicester, Jaguares, Stade Français, Crusaders y su presente en Honda Heat, Japón. Un recorrido lleno de entrega, pasión y resiliencia.
El líder que no necesita brazalete
Matera fue protagonista también dentro de la cancha. En su décimo duelo ante Inglaterra, se lo vio combativo, intenso, líder silencioso. En el primer tiempo recuperó tres pelotas vitales en los rucks, respaldó a sus compañeros y, como siempre, dejó el alma en cada contacto. En el complemento recibió una tarjeta amarilla por acumulación de infracciones, pero su presencia fue ineludible. Montoya es la voz de Los Pumas, pero Matera es su pulso.
Si Sudáfrica (22 partidos) es el rival al que más enfrentó, Nueva Zelanda (19) fue el escenario de sus batallas más memorables. Allí estuvieron las tres históricas victorias ante los All Blacks en 2020, 2022 y 2024, en las que Pablo fue protagonista indiscutido.

Un presente que honra el pasado
Actualmente en Japón, Matera atraviesa un gran momento en Honda Heat, donde el año pasado fue clave para la permanencia con cinco tries en dos partidos. Sueña con seguir siendo parte del proceso de Felipe Contepomi, y no oculta su deseo de jugar el próximo Mundial, donde podría estirar aún más su récord.
“El amor que siento por la camiseta de los Pumas va más allá de todo”, dijo alguna vez. Y esa frase se hace carne en cada tackle, en cada arenga, en cada paso que dio para volver a ponerse la celeste y blanca.
La caída y la redención
No todo fue gloria. En 2020, Matera fue suspendido por la UAR por unos tuits discriminatorios escritos en su adolescencia. Le quitaron la capitanía y la crítica pública fue feroz. Pero asumió su error, pidió perdón y eligió el camino más difícil: seguir adelante. “Sentí vergüenza. No podía imaginar que los había escrito yo”, confesó en una entrevista con L’Equipe.
Su regreso no solo fue deportivo, sino humano. Hoy es ejemplo de constancia, humildad y amor por la camiseta.
El más Puma de todos los tiempos
San Juan fue el escenario. Inglaterra, el rival. Y Pablo Matera, el protagonista de una jornada inolvidable. El jugador que más veces defendió los colores de la Argentina. El que volvió después de caer. El que sueña con seguir haciendo historia.
El hombre récord. El Puma eterno.