El rugby internacional vivirá un antes y un después: en 2028 se disputará por primera vez el Mundial de Clubes, un torneo que reunirá a las potencias del hemisferio norte y sur en una competencia sin precedentes. Así lo anunció Dominic McKay, presidente de la Asociación Europea de Clubes Profesionales (EPCR), tras la aprobación oficial del certamen en la Asamblea General celebrada en Cardiff.
El formato será impactante: 16 equipos competirán por el trono mundial, combinando a los ocho mejores clasificados de la Champions Cup, siete franquicias de Super Rugby Pacific y un club japonés invitado. El campeonato tendrá lugar cada cuatro años, iniciando en la temporada 2027/28 y repitiéndose en 2032, al menos en sus primeras dos ediciones, que se realizarán en sede europea aún por definir.
“Contamos con estas increíbles competiciones que gestionamos y queremos encontrar la manera de impulsarlas aún más, incorporando equipos de Australia, Nueva Zelanda y Japón a través de la Copa Mundial de Clubes”, afirmó McKay. A su vez, garantizó que la tradicional Investec Champions Cup seguirá siendo protegida y potenciada como la máxima competencia de clubes del mundo.
El torneo será disputado al final de temporada, por lo que las ligas involucradas —TOP 14, United Rugby Championship y English Premiership, además de las franquicias del sur— deberán reajustar su calendario para asegurar el desarrollo fluido del certamen.
Aunque es la primera vez que se organiza un torneo de este calibre, la idea no es del todo nueva. En 1997, Auckland Blues (NZ) y Brive (Francia) se enfrentaron en un duelo simbólico entre campeones de ambos hemisferios, con victoria contundente de los neozelandeses por 47 a 11. Hoy, ese sueño vuelve en forma de Mundial.
Esta iniciativa marca un paso gigante en el crecimiento del rugby profesional, con un objetivo claro: descubrir quién es realmente el mejor club del planeta.